lunes, 29 de marzo de 2010

Ausencia de ti.

La noche se fue lenta, paulatina, tal vez por la cantidad de droga que en mi cuerpo se asentaba, tal vez por tu ausencia. Un cigarrillo ameniza la noche. La noche que no es noche sin ti.
¿Cuando volverás? ¿Con que gentes te codeas?
La droga.

domingo, 28 de marzo de 2010

¡Dios me bendiga, sufro, porque estas cosas sanan mi alma!

No seas -mujer- persona que se avergüenza de que le rompieron el corazón.
Sé -mujer- bella, las lágrimas limpian el alma y el corazón.
No seas, mujer, una despreciable, inconstante, no tropieces.
Sé inteligente y piensa que estos dolores no duran por siempre.
No seas, mujer, que cree que "todos lo hombres son iguales"
Sé -mujer- persona que muere en la batalla final, con el corazón en las manos.
No seas infeliz. Mátate por amor.
Sé imperfecta, no te intoxiques de filosofía, ni de pesimismo.
No seas real, sueña, imagina -mujer- mátate y mata por amor.

Miel con sabor a hiel.

La miel me sabe a hiel.
Tus brazos me queman.
De tus ojos salen serpientes.
-Amor mío, muérete por favor.

viernes, 26 de marzo de 2010

Summer '68



Pink Floyd - Summer '68

Lo inexistente.

Ya no hay maldad,
ya no hay pobreza,
ya no hay violencia,
ya no hay tristeza.

¡Grande eres Señor!
haz acabado con mi vida,
para poder vivir
completamente en el sueño...




Mientras escuchaba a Christian Death escribí esa basura.

jueves, 25 de marzo de 2010

Aplastante dolor.

Al final del día no se trata de ti, o de mi, se trata de nosotros.
Y nosotros se trata de ti, de mi... y de la luna.
Y de nuestras almas que alzan sus voces como vociferando, como gruñendo.
Y no hay amores, está nuestro amor.
Y no hay corazones, solo nuestro corazón, uno mismo, latiendo sin escapatoria.
Lleno de árboles y arcoiris.
Al final, el arcoirirs que se forma con mis lágrimas y tú luz resplandeciente, cegadora, apaga todos los fuegos.

Yo soy tu insistente radiación de aluminio... trágico.
No. No hagas ni digas nada. Sólo vocifera, gruñe en nuestro corazón, que no es coraza ni es nada.

Somos fuego. Y mar. Y alas. Y nubes. Y alcohol. Y lágrimas.
Somos dos enamorados
(Yo soy morado y estoy más morado y enamorado que muchos).
que gozamos de toda la locura... que lo cura todo.

¡Si! Que locura todo.
Yo hago el papel del desesperado con un encendedor. Si. Hoy te como, hoy te encuentro, hoy te huelo, hoy te veo, hoy te observo, hoy no desperdicio nada de ti.

Esto es lo único que tengo que decir, y todo lo que quiera decir.
Esta es la verdad, y la verdadera mentira.
Esto es lo que quiero pero a lo que le temo.
Tu eres los 36 grados en mi cuerpo, y los hielos en mi espalda


En tu batalla me moriré en la línea final. Me arrancaré la piel antes de que no me mires.
En esta batalla me sofocaré y mi piel, mis hombros y mis rodillas se romperán antes de que me retire.

Buen día.

martes, 23 de marzo de 2010

She loves me, she loves me not.

Las manos frente al espejo. Sólo en caso de que no me quieras me retiraré. Asi que quien los necesita.

lunes, 22 de marzo de 2010

Restaurante.

¡Por poco no llego! Ahí estabas tú, y no pensé lo que pudiera ocurrir después, el tiempo se detuvo entre mis ojos y tus labios. No había espacio, parecía que sólo éramos tu y yo. De pronto, sin darme cuenta, llegue al lugar donde estabas tú, sonriente, impaciente, divertida, escondida, prófuga. Si en ese instante no me hubiese dado cuenta de que ya estabas lo suficientemente cerana a mí... no se lo que hubiera pasado. Por mi mente pasaron miles de pensamientos, nuevamente no existía el tiempo, ni el espacio, ni las demás personas, esos 5 segundos que estuve contigo antes de que tus sentidos notaran mi precencia me bastaron para comprender todo. Esos 5 segundos fueron como ir al cielo y regresar para contarlo. Tus ojos se dirigieron a mi mirada, mi mirada que en ese momento estaba perdida por el ímpetu del momento, mi mirada reflejaba una soledad tremenda, una cruda espantosa. El lapso en el que tus ojos se centraron en los míos y el momento en el que sonreiste cuando me miraste fue estrepitósamente abrupto, no me contuve y mi boca (muy arcaicamente) bosquejó una sonrisa también. No me imaginé lo que pudo pasar después, seguía con mi mente en blanco totalmente, fue un sentimiento nuevo... un comienzo, corazón, comida, viceras nuevas.
Abrúptamente todo ese sentir se desvaneció, presentaste a quienes son tus amigas, y regresé a la realidad. Nunca separé nada de tí. Me sentía como un extraño, como un completo extraño entre tanta gente, creía que podía inclusive matar a alguien y nadie se daría cuenta. Entre risas, sonrisas, regalos, comida, meseros ineptos y un ambiente por demás desconocido por nosotros, cada lapso de 2 ó 3 minutos nos dirigiamos las palabras, mis ojos brillaban, mis lágrimas se secaron, no me odie (como acostumbro).
Las risas me parecian ajenas, las miradas iban y venian, te descubrí un poco más y me introduje en el ámbito espacial más allá de mi diario.
Era solamente mirar a los ojos a las personas y soñar que no existía nadie más, sólo tu y yo. Me sentía un extraño, sí, pero cada lapso citado de 2 ó 3 minutos de verdad creía que estaba en el lugar indicado, a la hora indicada, el pánico en aquella plaza terminó. Tus brazos descubiertos y mis ojos descubiertos se entrelazaron, se abrazaron. Mi emoción se hizo notar, sentí el sudor frío rozando mi espalda, mis manos, cuidadosamente evitaba que lo notaras.
Una broma, otra broma, risas, gritos, fotografías, un mesero inepto que no sabía como afrontar la idea y la situación de que 10 personas estuvieran sentados en una mesa esperando la mejor de las atenciones. Ordenamos la comida, yo intuía que estabas pasandote un buen momento acompañado de amigos... y  de mi. Broma tras broma risa tras risa confirmaba que me sentía como un extraño entre tanta gente, un comentario lo enfatizó;"Y tú, ¿De dónde saliste?... esperaba algo así, no me molestó, sentí nuevamente el frío recorrer mi espalda y la soledad que me arrancaba la piel, tu interveniste y contaste la historia, la abrupta historia. "Tenemos un amigo en común" dijiste, "y me jaló la mochila"... "¡Que lindo!" alguna voz perdida alcanzó a vociferar. En ese momento el sentimiento de extrañez y  de no pertenencia se esfumó por completo.
Ordenamos, compartimos comida todos, compartimos un espacio delimitado en un tiempo aún más delimitado. Platicamos más, y cada ocasión que tu boca bosquejaba una sonrisa me sentia tranquilo, adaptado, seguro... feliz.
Al final fue una muy buena tarde, atosigaron de regalos a la cumpleañera, nos despedimos, y aquí fue cuando mi mente y mi cerebro perdieron totalmente el control de la situación. Te acompañe hasta tu casa, y en el camino un cigarro fue mi escudo para no tomarte de la mano. Otro cigarro y me mareo me mareo más de lo que el nerviosismo pudo hacer. Mi mente estaba completamente en blanco, solo vociferaba cosas que me venian a la mente, pensamientos y conocimientos aislados que podía ilar en mi mente y en el espacio. En un momento, luego del segundo cigarro trataba ade imaginar lo que pudieras estar pensando de mi; "este idiota que se cree", "estoy harta de verlo", "es aburrido", "quiero llegar a mi casa y que se calle", pero nunca sabré que es lo que piensas ni pensaste. Así está mejor, misteriosa, lenta, paulatina, tranquila, silenciosa y sigilosa. Tu. Tu. Tu.
A pesar de lo mareado que me encontraba pude seguir el paso y llegar a Salaverry contigo. Recordando la comida, en aquel restaurante de cuyo nombre no quiero acordarme, llegué a la conclusión de que fue una de las tardes más felices que he tenido en toda mi historia. Te dejé. Abriste la puerta. Te miré nuevamente a los ojos con mis labios. Mis labios que estaban muy secos como dos pájaros perdidos en algún desierto. Imploraba por algo. Por algo. En mi mente te canté alguna canción de cuna. Nos despedimos, parecía que llevabamos solamente 5 segundos de estar juntos, miré mi reloj y eran las 5 de la tarde. Nuevamente mis labios se acercaron a mi corazón, me sentí completo, feliz, estúpidamente feliz de encontrar mi lugar.
Nunca sabré que es lo que piensas, de eso estoy completamente seguro.
Y lo demás, lo demás es historia.

Breve crónica de mis sentimientos en una tarde en Italiannis.
Dedicatoria especial y espacial.

viernes, 19 de marzo de 2010

Nueva perspectiva.

Nuevos ojos. Nueva vida.


Cuando me dejes de querer

ya no habrá cielo encima de nosotros

porque el nosotros ya no existirá…

Cuando me dejes de querer

la luna ya no será de queso,

ni habrá un conejo en ella,

y la historia de la media mitad no será verdad.

Si tú no me quieres Saturno no tendrá anillos

y Dios llorará, llorará la pérdida del último gran amor en la tierra.

Y ya no iremos a Saturno,

porque ya no me querrás.

Cuando me dejes de querer el mar se hará de sangre

Cuando tú no me quieras

yo más te querré

y Dios estará de mi lado

Dios sabe que te amo.

Cuando tú no me quieras, mataré a tu psicóloga y a mi maestro de literatura,

quienes me dijeron que el amor lo podía todo…

lo podía…

El día que no me quieras

yo te amaré, como los peces aman el mar,

como las abejas aman la miel,

como yo amo la miel de maple,

como el demonio ama el odio,

y te amaré mas que los lobos a la luna y los hermanos a las hermanas.

Cuando me dejes de querer no habrá ni paraíso ni infierno y Dios llorará.

El veneno no surtirá efecto y sólo quedaré ciego,

no moriré,

lo único que me mataría sería que me dejaras de querer.

5/Dic/09

jueves, 18 de marzo de 2010

Miel de abeja.

Pasarán mas de dos mil años despues de esto,
probaremos mil labios más,
todos serán como los que acostumbras tener, locos,
insanos, atormentados, indecentes... poetas.

Prefiero la miel de abeja,
las abejas ya no me dan miedo.

Tú deberias tener miedo a las abejas.



Prefiero la miel de abeja.

martes, 16 de marzo de 2010

Noche tras noche.

No hay que entender a las mujeres, hay que amarlas, descifrarlas...gozarlas. Hay que escribirles poesía, cantarles canciones... darles el cielo.
El dolor más grande es la mujer, sí, pero también la alegría más ferviente.
Mírame, mírate. Míranos
Ámame, ámate. Ámanos.
Yo no busco a una mujer. Yo busco a la mujer. Yo no busco el amor, busco mi amor. Tú no me encontraste. Yo te miré, te tomé, te bebí, te comí con mis ojos y nariz. Yo te cazé y  busque... y encontré en ti mi amor. Y te abracé y te planteé en mi corazón como a una semilla.Ya mi corazón no es undesierto, ya es un bosque en el que florece nuestro amor.
Hoy no vivo solo. No. No sueño solo. Sólo sueño contigo. Vivo contigo.
¿Será verdad que todas las noches las estrellas bajan a tu ventana?
La luna te envidia, en vida. El sol te ama y te abraza.

sábado, 13 de marzo de 2010

Filosofía v.s viceras.

Uno a veces se pregunta el porque de las cosas, dejando de lado su verdadero significado, su esencia intrínseca, su sentir de gravedad. Lo mejor que uno puede hacer, bajo cualquier circunstancia es tomar las cosas con filosofía y no engancharse con tonterias que no dejan nada bueno ni te hacen crecer, en verdad eso es lo mejor que uno puede hacer. Se que es complicadísimo apartar las víceras y anteponer el cerebro pero si uno lo quiere si se puede.

Como el mar tu me dejaste a las orillas de tu amor.
Las estrellas sólo son fotografías viejas de lo que fueron alguna ocasión.

martes, 9 de marzo de 2010

Te desperdicié como una almohada.

Contemplando la soledad.
Sintiendo la frialdad.
Sometiéndome a rabiosa e intensa totalidad de descuidos carnales y sentimentales.
Esto no tiene que ver contigo, tiene que ver con todos.
Me corroe el alma saberte pero no tenerte, mirarte pero no tenerte.
Me opaca el pensamiento sentir tu olor con mis ojos pero no poderte tocar con mis oidos.
Parece el final de todo como lo conocemos.
-El final de las cosas sólo implican el principio de las mismas.
El final de las cosas nos retan a comenzar una nueva vida llena de horrores, llena de tonterías que la mera verdad no importan-
Me seduce la sencillez de tus ojos, la simplicidad de tus palabras, la emoción de tus actos, la apertura de tus labios.
Uno no se siente solo cuando te mira.
Uno sólo siente.

viernes, 5 de marzo de 2010

SE ACABÓ LA FIESTA, JULIAN MUERE SOLO.

No puedo creerlo.
Y si todos nos abrazamos, los abrazos son buenos.
:)

martes, 2 de marzo de 2010

El color de la muerte.

El blanco. Uno no puede saber si hay vida después de la muerte, pero en realidad yo envidio a la gente que muere porque ellos ya saben con exactitudd que sucede. Algún día todos moriremos.
¿Qué pasará por la mente de una persona a la hora de matar a alguien?
Es fascinante ir en el metro con tanta gente sin saber siquiera su nombre, y mucho menos si está pensando en matarte o en torturarte. Si a lo mejor sólo es mi mente opacada por pensamientos atroces.
Conmi pie en tu cuello te tengo justo en donde te queria tener.
CONSTE QUE LO ESTOY INTENTANDO